Diosito

Este blog es personal y por lo tanto escribo lo que se me da mi chingada gana, por ejemplo; hoy que me siento hiper relajado y sin estrés me dan ganar de chuparmela yo solito así que hoy voy a tirar algo de aceite.

Dicen que me parezco al mismisimo "Jesus de Nazareno" 😒 por mis matas largas y mi pelo en cara. Más bien me parezco al Arismendi (el mochaorejas) o al Señor de los Cielos(Amado Carrillo) o bien al changoleón. El caso es que me dicen "Diosito" y debo decirlo que me da mucho orgullo portar ese mote, sobre todo porque entre los conocidos se fueron dando cuenta que si hacia milagros alv!!!

Para pronto cuando les mostré mi aceite de cannabis y los miles de usos que tiene me fui ganando su respeto, los sanaba de; crudotas, de dolores de hígado, de rasguños en su jeta, de chorrillo, de dolor de espalda, disfunción eréctil, de dolor de piernas, de pies apestosos, de chipotes y de heridas por caídas de briagos y lo más importante: Sanación mental. Me encantaba oírlos hablar y eso lo apreciaban mucho, no soy muy viejo ni muy joven pero soy muy relajado y mi filosofía es: mientras la vida siga todo se puede arreglar.

A veces llegaba con sendos pomos y ellos en plena sequía, me contaban que hasta veian un resplandor a mi rededor. Algunos compas que murieron cuentan que cuando llegue al grupo le di vida, les ponía contento el corazón porque les hablaba de todo y de nada ¿pues como no? hijos de la verga les apadrinaba la peda y a veces sus piedrulces para que se desconectaran y le dieran vida al escuadrón, pero: ¡¡¡OH PUTA MADRE, JAMÁS ME ARREPENTIRE!!! me da gusto saber que al menos sus ultimos días la pasaron a toda madre. 

 

Recuerdo un día que yo ya estaba hasta la puta verga del trabajo y sentí por mi sentido arácnido que era requerido en el punto teporochil, me salí y fui a comprar un "combo azulito" y cuando llegué me pareció raro que el jonuco estaba en silencio y ahí en la cama estaba el Yantas dormido y en un silla andaba el Dromingo, estaba ahí sentado en medio de la nada tenía los ojos mojados y el wuey estaba triste, estaba llorando, saqué el pomo y se lo di y fue como si le brillaran los ojos yo estoy casi bien seguro de que ese día él estaba pidiendo a Dios, Diosito tráeme un pomo¡¡ y Diosito región Zumpango lo escuchó y llegó con su cura. Me contó que estaba llorando porque se sentía miserable ahí; sólo, seco y con la crudota mortal y que me vió llegar como un milagro de esos que se cuentan por varias teporocheadas más. 

O ese día tan extraño que en una pelea de gallos, apenas ibamos entrando y una dama nos ofreció un boleto para una rifa, nomás docientos pesitos aflojamos y nos ganamos un pomo fino con hielos, chescos y hasta dos six de cervezas, mi compa el empre me dijo: ¡¡¡Ahuevo, pues venimos con Diosito!!! 

Probablemente hay cosas mas importantes por las que muchas otras gentes me recuerdan pero hoy se trato de inflar el ego, esta vez fue porque me siento bien de todo los aspectos y con ganas de seguir haciendo milagros, ahora por otros rumbos.