Alivio

 Cómo la sanación llega ante el enfermo y cuyas súplicas son atendidas, cómo la llamada de alivio le llega al que está necesitado, cómo el día llega a quien ha sufrido una noche terrible, así me siento, bueno, un poco mejor que todo eso junto. 

Es agridulce pero más dulce que nada. Me sentí vencido y reconozco que te perdí, pero me sana mucho verte felíz. Y saber que al menos tendré un momento al día para contarte todo lo que guardo, lo que no puedo decir a nadie. Es tan grato poder contarle a alguien todoooo. Yo sé que no nada más lo necesitaba yo, sé que igual a ti te alivia el alma. 

Quiero que tengas fuerza, quiero que no te conviertas en hueco y no te dejes caer. Apoyate de lo que tengas y aferrate. Pero por lo que más quieras no te tires al piso y tampoco me dejes botado ahí en el cajón de los recuerdos. No me olvides y nunca me dejes. 

Te escribo porque es mi forma de contar mis cosas sin que me veas mal, o sin que me veas llorar. 

Gracias amiga, te cuidare más de lo que crees, no soportaría de nuevo perderte. Baje al Inframundo y ahora regreso como perro con la cola entre las patas. Resignado. Mis días hoy son tratar de apagar mi mente, por eso esa canción que te puse en el comentario. Me anestesio viendo la TV, me pierdo para no pensar, para estar sin estar. Para procurar seguir vivo aunque sea en estado zombi. 

No he tomado pero creo ya me hace falta, me perderé en el vicio no porque quiera, es porque simplemente así me funcionaba: apagaba la mente y podía al fin descansar.  Y de llorar ni te cuento, pero igual me ayudaba mucho. Lloro por qué me da tristeza pensar que nada volverá a ser igual, todo pudo haber sido diferente y lo eche a perder. 

Hoy te agradezco que hagas el esfuerzo por acercarte, me llena de gusto y orgullo saber que aún queda algo de esperanza para poder alimentar nuestras almas con charlas, risas, locuras y un abrazo. Gracias amiga y cuenta conmigo por favor. No te conviertas en Hueco.